Medicamentos para adelgazar y su impacto en la industria de alimentación y bebidas

Medicamentos para adelgazar y su impacto en la industria de alimentación y bebidas

Recientemente,  participamos en el webinar: ‘Fármacos de adelgazamiento: ¿hacia un nuevo tablero de juego en alimentación y bebidas’, organizado por la consultora Lantern, en el que se habló sobre cómo el auge de los fármacos agonistas de GLP-1 está influyendo en los hábitos de consumo y qué oportunidades presenta este fenómeno para la industria de alimentación y bebidas. 

Fernando Caballo, técnico de Vanguardia y Tendencias. 

fcaballo@cnta.es 

El GLP-1 es una hormona natural que contribuye a la regulación del azúcar en sangre y también ayuda a ralentizar la digestión, lo que promueve una sensación de saciedad y puede ayudar a controlar el peso, además de tener un impacto directo en el metabolismo 

Actualmente, existen varios tipos de medicamentos, denominados agonistas, que simulan la acción del GLP-1, los cuales se administran generalmente forma inyectable, aunque también hay ya alternativas orales. En un principio están indicados para pacientes con diabetes tipo II, pero en los últimos años se ha incrementado incrementado exponencialmente su uso para ayudar a personas a controlar su peso. Este tipo de medicamentos requieren de receta y no están subvencionados en España. Su coste oscila entre los 130 y los casi 300 euros al mes. 

 ¿Nuevo nicho de mercado?

En Estados Unidos un 6% de la población adulta toma actualmente algún análogo de GLP-1”, de los que “un 56% son personas no diabéticas que buscan reducir peso, y el 65% de ellas mantiene el tratamiento más de 6 meses“, informó David Lacasa, socio de Lantern en el webinar.

“Durante 2024 se vendieron en España más de 5,5 millones de unidades de agonistas de GLP-1, de los que más del 50% sería para tratar la obesidad”, indicaron desde Lantern

En España, durante 2024, se vendieron más de 5,5 millones de unidades de agonistas de GLP-1. De estos, más del 50% sería para tratar la obesidad”. Este mercado crece a un ritmo del 30% anual, y ya factura más de 430 millones de euros en nuestro país, según datos facilitados por Lantern. Si el sector mantiene el mismo ritmo de crecimiento en ventas “se prevé que para 2027 más de 940.000 personas consuman este tipo de medicamentos.

Oportunidades para la industria alimentaria 

Esta tendencia abre una serie de oportunidades para la industria alimentaria como reacción al consumo de esta clase de medicamentos. Algunas que señaló Lacasa en el evento fueron: 

  • El empleo de ingredientes que interactúen menos con este tipo de tratamientos: menos azúcar, grasas y picantes. 
  • Ampliación de gamas y productos más orientados a la salud y al control médico. 
  • Trabajar versiones “mini”, reducción de porciones y de cantidades por unidad, incluso a través de innovaciones en pack, para conseguir hacer porciones dentro de un mismo envase. 
  • Potenciación en los mensajes de aquellos beneficios funcionales como la salud intestinal, aporte de nutrientes, proteína o la inclusión de suplementación de estos beneficios funcionales en productos actuales. 
  • Creación de secciones, en retail, dedicadas a productos compatibles con tratamientos GLP-1, u ofrecer servicios de nutrición en el propio establecimiento. 

En el mercado ya hay marcas que tienen en cuenta a este target a la hora de diseñar sus productos. Así, algunas empresas están:

  • Lanzando productos con porciones más controladas 
  • Llevando a la parte frontal del envase mensajes como “porción reducida” o el número de calorías totales por ración. 
  • Reformulando recetas con ingredientes que fomentan menos la aparición de efectos secundarios. 
  • Aumentando la cantidad de proteína u otros nutrientes en sus productos para mitigar la pérdida de altas cantidades de masa muscular, a medida que se baja de peso.

Algunos ejemplos que expuso Lacasa de productos pensados para este target fueron los batidos de Smoothie King, diseñados para personas con tratamiento de GLP-1; las barritas, suplementos y batidos de Stargut, “marketeados” para GLP-1; los complementos alimenticios o la línea de comida congelada Vital Pursuit de Nestlé, lanzada en Estados Unidos y pensada para aquellos que quieren complementar el uso del tratamiento con estos medicamentos con una nutrición adecuada; o el batido nutricional Protality de Abbot, con alto contenido en proteínas para ayudar a los usuarios de GLP-1. 

A pesar de esas oportunidades que ya se están viendo gracias al auge del consumo de los medicamentos agonistas de GLP-1, algunos sectores de alimentación y bebidas verán reducidas sus ventas, ya que si continúa el ritmo de crecimiento actual de consumo de estos fármacos para 2027 se prevé que en España “el gasto en la cesta de la compra se reduzca en 215 millones de euros”, aclaró David Lacasa.

Los alimentos preferidos por los usuarios de GLP-1 

Sin duda, el consumo de agonistas de GLP-1 implica el incremento o disminución en las ventas en algunos grupos de alimentos. “La ingesta de ciertos alimentos como los grasos o fritos, picantes, condimentados, altos en fibra, los dulces o por la ingesta de comidas pesadas y de grandes porciones o de alcohol empeora los efectos secundarios que pueden ir desde la modificación de las papilas gustativas, náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento, dolores abdominales o mal aliento, entre otros”, señaló el experto de Lantern.

“La toma de agonistas GLP-1 refuerza el impacto en el consumo de ciertos productos:  caen los dulces y los productos con mucha grasa y crecen los productos frescos y yogures”, se indicó en el webinar

 En el webinar también vimos que, según los datos de un estudio realizado por la Universidad de Cornell (Estados Unidos), “la toma de agonistas GLP-1 refuerza el impacto en el consumo de ciertos productos:  caen los dulces y los productos con mucha grasa y crecen los productos frescos y yogures. En el caso de los yogures, la propia Danone ve que esta tendencia le beneficia, ya que la compañía registró “un consumo de casi tres veces mayor en los hogares de Estados Unidos donde se utiliza GLP-1, haciendo incrementar la categoría un 40% durante 2024″.

Jesús Roman, presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación

Por último, en el evento también participó Jesús Román, presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación. El experto vaticinó que “si una cosa es tendencia en Estados Unidos llegará a España más tarde o temprano. Esto es imparable”. 

También Román señaló que “según vaya bajando el precio de los agonistas de GLP-1, se irá incrementando el número de usuarios” e indicó que “en un hogar lo más cómodo es que si alguien hace dieta o necesita comer de una determinada manera, todos sus miembros sigan ese mismo patrón”.

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